Recibido de Licenciado en Teatro en Córdoba, Paolo actualmente vive en Buenos Aires y sólo puede venir de visita dos veces al año, debido a la distancia y a la cantidad de trabajo.

Tras cinco años de estudio, Paolo logró recibirse y encaminar su vida hacía lo que quería  hacer “En mi último año, me instalé en Buenos Aires. Preparé mi tesis allá y ya me quedé ahí”

Mauricio Layú fue su primer contacto en Buenos Aires “A los seis meses de instalarme, de casualidad, me manda un mail y me dice que se iba la boletera y arranque como boletero, después como acomodador, asistente y así…”

Con esos primeros trabajos, aprovechó para consumir cuanta obra le pusieran en frente “Yo soy fanático del teatro, yo miró todo”

Paola cuenta que, en sus inicios fueron muchos los casting en los que debió presentarse para poder conseguir papeles “Me saqué muchas fotos, mandé muchos mails, googlé a todas las productoras y las sequé” confiesa entre risas. Después de eso, con los primeros papeles ya quedó cargado en una base de datos y desde ahí lo contactaban “Ahora no estoy haciendo publicidades porque no tengo tiempo”

Actualmente, participa de la obra El Equilibrista, dirigida por César Brie, uno de los Directores referentes en Latinoamérica y gran protagonista de sus estudios universitarios “Este proceso fue largo y de mucha investigación” La obra lleva 6 años en cartelera y eso, no es algo que suceda muy a menudo, por el contrario, suelen durar 2 años como máximo.

Gracias al gran trabajo realizado  en su obra, Paolo quedó a cargo de El Equilibrista y, Cesar, el Director volvió a Italia sin verla “Hace dos meses vino y vio la obra, por primera vez, después de 6 años desu estreno”

La realidad para Paolo, es que su sueño le demanda mucho tiempo y, como él dice, todo es muy difícil, casi no pasa tiempo en su casa, pero en compensación, está recorriendo el mundo con sus obras “Viajamos mucho, viajamos por toda la Argentina, estuvimos en Madrid, Israel, acabamos de llegar de Miami” Por otro lado, él comprende el sacrificio de lo que está haciendo, pero  se plantea que no podría estar mejor.

En lo personal, Paolo dice que lo que más disfruta es actuar y que le gustaría estar más arriba del escenario, por lo que su intención a futuro es volver a sus obras, pero nada está dicho “No hay una formula, eso es lo lindo y lo perverso del teatro”