La Lic. Carina Dutto habló sobre  estrategias para poder optimizar el tiempo y la gestión de emociones a la hora de emprender.

Primero que nada, la planificación es muy necesaria a la hora de emprender, no sólo para producir o  vender sino también para difundir “Hay  que aprender sobre lo que uno está vendiendo… Uno no llega a la gente por estar en la avenida, sino por cómo ofrecemos nuestro producto”

La decisión que se toma sobre qué emprender, se basa en dos pilares fundamentales: el proyecto de vida que se tenga y el estudio y la preparación que uno debe dedicarle al emprendimiento.

La idea creativa es el punta pié inicial, pero  hay cuestiones que deben sostenerse como por ejemplo, la continuidad en el tiempo.

Frente a las adversidades que pudieran presentarse, lo ideal es tener un grupo de autoayuda donde cada quien tenga su espacio para contar su experiencia y así ir fortaleciéndose “Cuando uno arranca seguramente todo va a ir muy bien,  pero puede haber alguna meseta y es normal” En este punto, es donde empieza a jugar la creatividad y la automotivación.

Es importante tener en cuenta que, la motivación es lo que nos lleva a continuar y levantar nuestro proyecto. La autovaloración juega un papel de relevancia.

Para encontrar el aliento, es bueno que, en los grupos de whatsapppor ejemplo, quien coordine, pueda enviar mensajes motivacionales porque todos esos estímulos son valorables “Son muy buenos los talleres donde se puedan contar las experiencias, sentimientos y hacer  un balance  sobre el trabajo”

Sobre el fracaso, Dutto sostiene que hay que ser conscientes de que es una posibilidad, pero que hay que aprender de ese fracaso, capitalizarlo y volver a intentarlo.

“Lo que tiene que tener el emprendedor, es la intención de seguir creciendo y no quedarse en la idea inicial”